Hoy nos levantamos muy pronto, era el último día que desayunabamos en este maravilloso hotel y queriamos disfrutarlo, despues tomamos un taxi hacia la oficina de alquiler de coches, esta mañana no me sentí bien, en realidad la noche anterior ya no me sentia bien pero pensé que mi decaimiento era producto de la pena que me daba irme de New York, pero por la mañana descubrí el verdadero motivo, no podía ni tragar, tenia un dolor horrible de garganta y sentia muchos escalofrios, estaba totalmente atontada, de inmediato pensé que esto se debía a que hace dos dias como recordareis llovio muchisimo y tal vez me enfrié, asi que presentí que tendria que pasar unos cuantos dias mal. Una vez tuvimos nuestro coche ( un Hyundai Santa Fe de color rojo) pusimos nuestro navegador en marcha y nos aventuramos en las carreteras de Estados Unidos, nuestra primera imprensión y comentario fue que diferentes eran de las carreteras españolas, son amplisimas, casi todo son autovias con cuatro carriles en cada lado, la forma de conducir de los americanos nos pareció muy respetuosa y educada, tal y como en esta semana nos han parecido ellos aunque aún nos queda mucho viaje por delante, tendremos que valorar si al final seguimos opinando lo mismo, asi que el viaje se hizo muy comodo de no ser por mi malestar que iba en aumento y que lamentablemente no me dejaba disfrutar como me hubiera gustado de nuestra primera etapa en coche.
Después de unas cuatro horas y media de amplias carreteras, alguna parada para tomar caée y tras atravesar tres estados( New Jersey, Delawere y Maryland) llegamos a Washington, desde que apenas divisamos los alrededores de la ciudad ya nos dimos cuenta de que era una ciudad majestuosa, con unas casas verdaderamente elegantes....si , creo que esa seria la palabra que mejor definiria su arquitectura, durante el trayecto y en nuestra llegada no paro de llover, a la lluvia le acompañaba un frío horrible que desde luego no eran los mejores compañeros de mi malestar.
Desde el coche segun nos acercabamos al destino hice algunas fotos de las casas que ibamos encontrando. Una vez en el Hotel y tras dejar el equipaje en la habitación, salimos dando un paseo tratando de encontrar algun restaurante para comer ya que era un poco tarde y no sabiamos si encontrariamos algún sitio. Tuvimos suerte y muy cerca del hotel vimos un restaurante mexicano asi que entramos, el sitio era muy agradable y eramos los unicos clientes a excepción de un policia que medio dormitaba mientras miraba o jugaba con el movil, apenas levanto la vista al vernos entrar, nosotros nos colocamos en un rinconcito apartado al lado de la ventana y pedimos nuestra comida, estabamos muy hambrientos...asi que no escatimamos y pedimos nachos para empezar y una parrillada de todo tipo de carnes para los dos... lastima que el hambre se fuera muy rápido....,mientras esperabamos hablabamos distraidos sobre el viaje , de repente a traves de los cristales vi a un hombre de color con no muy buen aspecto que cruzaba deprisa la calle en dirección a nuestro restaurante, miraba nervioso en ambos sentidos con la mano en el bolsillo de lo que parecía una especie de gabardina vieja, no se por que al verle se me acelero mucho el corazón , me puse muy nerviosa , todo sucedió en un segundo, no pude decirle nada a Santiago, el estaba de espaldas y no podía verlo, la puerta se abrio y el hombre entro corriendo, subió a gran velocidad los poquitos peldaños de la entrada y abrió con fuerza la puerta, se dirigia hacia la barra, a nosotros no nos vio puesto que estabamos en un rincón aunque por supuesto a la salida nos veria perfectamente, saco la mano del bolsillo y la verdad no pude ver que saco...pero puedo imaginarme un arma perfectamente, cuando vio al policia que estaba alli salió aún con mas prisa de la que llevaba al entrar y se fue corriendo por la calle......, solo entonces pude hablar , mi corazón se salia del pecho, desde que le vi sabia que iba a pasar algo, gracias a ese policía que vereis en las fotos no ocurrio nada, una vez pasado el susto me levanté y fuí a comentarle a los camareros lo que habiamos visto ya que ellos no estaban en ese momento en la barra , el policía tampoco se había enterado ya que como os cuento estaba muy concentrado en lo suyo, todo paso demasiado rápido, los camareros se lo dijeron al policía y este salió corriendo tratando de localizarlo, mientras nos sirvieron la comida...pero la verdad entre el susto y mi gripe....no pude comer mucho,mas tarde regreso el policía, parece ser que no dió con él.
Con este susto en el cuerpo nos fuimos hacia el hotel, llovia, hacia frío y yo me sentia fatal asi que muy a nuestro pesar esta tarde no la aprovechariamos como habiamos pensado para conocer la ciudad, ademas nos habian dicho que no era una ciudad para pasear de noche por que era muy peligroso, esto unido a lo que acababamos de vivir hizo que nos pareciera muy buena idea descansar en el hotel. Comentabamos que increiblemente no habiamos tenido ningun susto en New York ni habiamos sentido ningún día inseguridad, sin embargo aquí nada mas llegar nos encontramos con este panorama y lo cierto es que no nos lo esperábamos.
Después de unas cuatro horas y media de amplias carreteras, alguna parada para tomar caée y tras atravesar tres estados( New Jersey, Delawere y Maryland) llegamos a Washington, desde que apenas divisamos los alrededores de la ciudad ya nos dimos cuenta de que era una ciudad majestuosa, con unas casas verdaderamente elegantes....si , creo que esa seria la palabra que mejor definiria su arquitectura, durante el trayecto y en nuestra llegada no paro de llover, a la lluvia le acompañaba un frío horrible que desde luego no eran los mejores compañeros de mi malestar.
Desde el coche segun nos acercabamos al destino hice algunas fotos de las casas que ibamos encontrando. Una vez en el Hotel y tras dejar el equipaje en la habitación, salimos dando un paseo tratando de encontrar algun restaurante para comer ya que era un poco tarde y no sabiamos si encontrariamos algún sitio. Tuvimos suerte y muy cerca del hotel vimos un restaurante mexicano asi que entramos, el sitio era muy agradable y eramos los unicos clientes a excepción de un policia que medio dormitaba mientras miraba o jugaba con el movil, apenas levanto la vista al vernos entrar, nosotros nos colocamos en un rinconcito apartado al lado de la ventana y pedimos nuestra comida, estabamos muy hambrientos...asi que no escatimamos y pedimos nachos para empezar y una parrillada de todo tipo de carnes para los dos... lastima que el hambre se fuera muy rápido....,mientras esperabamos hablabamos distraidos sobre el viaje , de repente a traves de los cristales vi a un hombre de color con no muy buen aspecto que cruzaba deprisa la calle en dirección a nuestro restaurante, miraba nervioso en ambos sentidos con la mano en el bolsillo de lo que parecía una especie de gabardina vieja, no se por que al verle se me acelero mucho el corazón , me puse muy nerviosa , todo sucedió en un segundo, no pude decirle nada a Santiago, el estaba de espaldas y no podía verlo, la puerta se abrio y el hombre entro corriendo, subió a gran velocidad los poquitos peldaños de la entrada y abrió con fuerza la puerta, se dirigia hacia la barra, a nosotros no nos vio puesto que estabamos en un rincón aunque por supuesto a la salida nos veria perfectamente, saco la mano del bolsillo y la verdad no pude ver que saco...pero puedo imaginarme un arma perfectamente, cuando vio al policia que estaba alli salió aún con mas prisa de la que llevaba al entrar y se fue corriendo por la calle......, solo entonces pude hablar , mi corazón se salia del pecho, desde que le vi sabia que iba a pasar algo, gracias a ese policía que vereis en las fotos no ocurrio nada, una vez pasado el susto me levanté y fuí a comentarle a los camareros lo que habiamos visto ya que ellos no estaban en ese momento en la barra , el policía tampoco se había enterado ya que como os cuento estaba muy concentrado en lo suyo, todo paso demasiado rápido, los camareros se lo dijeron al policía y este salió corriendo tratando de localizarlo, mientras nos sirvieron la comida...pero la verdad entre el susto y mi gripe....no pude comer mucho,mas tarde regreso el policía, parece ser que no dió con él.
Con este susto en el cuerpo nos fuimos hacia el hotel, llovia, hacia frío y yo me sentia fatal asi que muy a nuestro pesar esta tarde no la aprovechariamos como habiamos pensado para conocer la ciudad, ademas nos habian dicho que no era una ciudad para pasear de noche por que era muy peligroso, esto unido a lo que acababamos de vivir hizo que nos pareciera muy buena idea descansar en el hotel. Comentabamos que increiblemente no habiamos tenido ningun susto en New York ni habiamos sentido ningún día inseguridad, sin embargo aquí nada mas llegar nos encontramos con este panorama y lo cierto es que no nos lo esperábamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario