Esa ha sido la actividad con la que Santiago me ha sorprendido hoy, cuando terminamos de desayunar cogimos el coche y nos dirigimos a Clarkdale que se encuentra a unos 25 kms al oeste de Sedona,una vez allí buscamos la señal que anunciaba el Ferrocarril Cañon Verde.
El tren ofrece una selección de primera clase o turista, nosotros nos decantamos por la primera clase, este tren es la única manera de acceder al Cañon Verde, el viaje completo dura cuatro horas y cubre unos 30kms, el tren dispone de vagones exteriores donde puedes ir observando el paisaje y tomando fotos.
LLegamos a la estación muy pronto , eran las once de la mañana e hicimos la reserva, ya había mucha gente esperando, el tren salia a la una de la tarde asi que decidimos esperar alli dos horas, mientras tomamos café y paseamos por los alrededores de la estación, eso si protegidos por nuestra gorrita, os recuerdo que no nos puede dar el sol por los antibióticos y la verdad es dificil pues aqui como podeis ver en las fotos el sol brilla con toda su intensidad , hoy nos sentiamos bastante bien aunque un poco debiles tal vez por los antibióticos asi que pensamos que una actividad ligera como esta nos vendria muy bien.
Una vez dentro del tren, nos recibieron con champagne , una botellita de agua y unas patatas fritas, eso para amenizar la espera hasta que el tren saliera, ya que una vez que se inició el trayecto disponiamos de un buffet con platos frios y calientes, eran mas bien aperitvos , todo esto estaba incluido en el precio, lo único que tenias que pagar a parte eran las bebidas ( excepto el agua que era gratuita) , tenian cockteles, helados, la verdad es que nos encanto y ademas del buffet nos tomamos un cocktail.
Estas excursiones panorámicas se vienen realizando desde 1990 y se han convertido en una de las mayores atracciones turisticas de Arizona, anteriormente este tren fue construido para trasladar a los trabajadores de las minas de cobre de San Jeronimo.
El viaje transcurre entre tierras que alguna vez fueron hogar de los pueblos de Sinagua y Hohokam, el final del trayecto es el rancho de Perkinsville, el viaje fue precioso , el tren lleva un ritmo lento que te permite moverte con total libertad y salir al vagón exterior en cualquier momento, pasamos por pasillos preciosos de rocas, entramos a traves de un tunel y atravesamos numerosos puentes que parecian tan debiles que impresionaba ver pasar el tren sobre ellos, estaban construidos en madera .
Han sido cuatro horas maravillosas disfrutando de este paisaje que nos tiene enamorados, una vez finalizado el trayecto regresamos al coche y dimos una vuelta por los alrededores , decidimos subir a un pueblo llamado Jerome que se encuentra en lo alto de una montaña desde donde sospechabamos tendriamos vistas maravillosas y tomamos alguna foto, despues regresamos a Sedona.
Esta noche habiamos reservado en el maravilloso restaurante del hotel, pero aunque no os lo podais creer lo anulamos, mejor dicho lo cambiamos de día, no sabemos si por el sol que nos pudo dar en el tren al ir en el exterior o por los antibióticos lo cierto es que ya de regreso nos sentiamos terriblemente cansados y con alguno de nuestros sintomas, mañana a las siete de la mañana tenemos reservado un tour en Jeep que nos llevara por alguno de los lugares mas bonitos de Sedona, asi que es mejor que hoy descansemos, es una verdadera lastima estar en un lugar como este y no sentirnos bien, esto se nos esta haciendo ya muy duro pues llevamos asi practicamente todo el viaje, espero poder deciros pronto que esto acabo definitivamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario