Siempre os hablo de todas las cosas bonitas y sorprendentes que vemos en Estados Unidos, pero tambien tengo que deciros alguna negativa, lo cierto es que en las grandes ciudades de este pais no se puede pasear, no existe esa costumbre y de hecho lo desaconsejan por ser incluso peligroso, esto ya lo observamos en Miami, donde si recordais en Ocean Drive todo era un ir y venir de gente, pero fuera de alli era dificil encontrar personas en las calles y las que se veian...no daban demasiada confianza, de hecho una vez que anochecia no habia absolutamente nadie, como sabeis ayer os comente que esto mismo sucedió anoche cuando ibamos hacia el hotel, la única ciudad donde pudimos disfrutar de un ambiente por las noches semejante al de España fue en New York, por eso mismo conocer New Orleans paseando es complicado, pero encontramos una opción estupenda para conocer al menos la parte mas señorial y bonita, lo hicimos en tranvia.
El Tranvia St Charles tiene multiples paradas, nosotros lo tomamos justo enfrente del French Quarter, con el pudimos conocer la zona de la ciudad vieja de Carrolltown ,pasamos por las universidades de Tulane y de Loyola,seguimos hasta el Garden Districtic que en un tiempo pasado fue una plantacion de azucar, las majestuosas casas que vereis en las fotos son las tipicas casas sureñas de las peliculas, donde existian las plantaciones de algodón y trabajaban los exclavos, por ejemplo son casas que os recordaran a la famosa pelicula Lo que el viento se llevo, ya que se rodo en una mansión de este barrio y tambien fueron usadas en la serie Norte y Sur. Podreis observar que no se ven personas, nos hubiera encantado poder pasear por este barrio y detenernos en alguna de estas casas para verlas de cerca pero como os digo nos indicaron que no era prudente, asi que disfrutamos de la experiencia de ir en un tranvia íipico de esta ciudad.
Por la noche Santiago me tomo algunas fotos en la recepción de nuestro hotel y nos fuimos de nuevo al French Quarter a cenar en un maravilloso restaurante llamado Arnaud donde habia jazz en directo, ademas presenciamos una pedida de matrimonio en una de las mesas y posteriormente los musicos se acercaron a la pareja para interpretarles una pieza en su honor. La cena fue deliciosa y la velada inolvidable, brindamos por lo bien que nos sentiamos y por que desde hacia ya varios dias nos habiamos olvidado de nuestra gripe
No hay comentarios:
Publicar un comentario